Ya se ha hablado en este blog en más de una ocasión del arte contemporáneo, conceptual, onírico, catárquico, oncológico, ornitorrinco y demás mierdas por el estilo. Basurilla para gafapastas. Sin embargo, de cuando en cuando, uno tiene ocasión de encontrarse con expresiones artísticas que, sin ir más allá de la mera curiosidad, no puedes dejar de reconocerles cierto mérito. Como el caso del artista chino Li Wei, fotógrafo enamorado de las situaciones imposibles. Cuando se contempla la composición de sus imágenes, lo primero que le viene a uno a la cabeza es una única palabra: PHOTOSHOP. Nada más lejos de la realidad. Por supuesto que hay truco, faltaría más. Pero lo meritorio del caso es que el mismo está llevado a cabo en la parte de preproducción (espejos, tomas, perspectivas, ángulos...), nunca en postproducción. Los retoques posteriores son mínimos, casi nulos, y las tramposas imágenes son mostradas prácticamente tal y como las tomó la cámara. As is. Y el resultado es sorprendente.
El proceso de una de esas puestas en escena puede contemplarse en este vídeo.
Web del artista
El proceso de una de esas puestas en escena puede contemplarse en este vídeo.
Web del artista
3 comentarios:
Joer, qué cosa tan curiosa... Es una mezcla entre Matrix y Jackie Chan. Y la verdad es que si no hay potochop, no deja de tener mérito.
Voy a visitarme la web.
¡Felicidades al nuevo galateo por este post!
Bienvenido, hermano.
Lo del Li Wei no creo que sea muy difícil; Panadero y yo tenemos planeada una sesión en esta línea: sólo necesitamos la cámara del móvil y a Scarlatti como modelo.
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